Lo cierto es que pocas veces exprimo las posibilidades de movilidad que van implicitas al concepto de ordenador portatil, aunque en este preciso instante doy gracias por poder estar describiendo este momento a la par que lo visiono, un repartidor de heineken clonico a "borat" departiendo muy cariñosamente con la camarera medio choni del lorena a primeriza hora de la mañana mientras suena una especie de recopilatorio de musica clasica seleccionado por el denostado Luis cobos, menuda fauna puebla las cafeterias olivicas de toda la vida sobre todo aqui cuna deherederos de familias pudientes de toda la vida, desprecocupados por el dinero y habituados a excentricidades y repanchinguez.
A pesar de trabajar a medio metro de este lugar, nunca me habia sentado tranquilamente a tomar un desayuno americano en una de sus clasiquisimas estancias, lo que sucede es que ayer llevado por una torpeza matutina multiplicada por tres inunde el "faro de vigo" del dia de la cafeteria de al lao con el ardiente cafe que estaba intentando asimilar y hasta dentro de unos dias no tendre la voluntad de volver a pisar la cafeteria en cuestion, este suceso me recuerda a cuando hace años me introduje en el bar lar,el bar de la esquina de toda la vida, con el unico proposito de sellar una quiniela y termine vomitandole en la barra al camarero¡¡¡ ni que decir tiene que no he vuelto a pisar ese bar hasta que cambio de dueños y para que eso sucediese tuvieron que pasar quince años, no tengo esa capacidad de autorredimirme ante situaciones de este estilo, soy muy pero que muy poco capaz de anular de mi memoria esos recuerdos que tanto sonrojan y por ello suelo evitar esos lugares en los que he metido la gamba, aunque sea de una manera tan pueril, en fin son las nueve y media y corro el riesgo de mancillar este no tan impoluto teclado con una mezcla de cafe y zumo natural, soy torpe por naturaleza en mis genes existe una querencia muy disipada hacia la verticalidad de los objetos que me rodean, con lo bonito que era el jarron¡¡¡ bueno me voy a graduar a Ernesto y me da que no voy a parar en toda la mañana
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