blood pressure flying high

Tengo la tension por las nubes y no se me ocurre otra manera de enmendarlo que expresando mi mas sincero agradecimiento a los litros de cafe ingeridos a lo largo de toda mi vida y a esos donuts con perlas de colores que los acompañan en ocasiones, sigo pensando que la ciencia medica es excelente cuando tienes un problema grave, cuando te empotras contra una farola o te caes a rebolos por unas escalera pero... los factores geneticos y los malos habitos del dia a dia no son algo que me preocupe en exceso, algo tiene que llevarnos al hoyo y si no es una avellana obstruyendo la traquea lo será un virus contagiado por un estornudo ajeno en un viaje de placer a tai pei o quiza te algun aeroplano se esmendrelle contra ti mientras das un tranquilo paseo por una inmensa salina del sureste chileno, y si te tiene que matar un perturbado republicano durante una medianoche de un cuatro de julio en whasintong pues que asi sea, pero a mi que no me quiten los donuts ni el cafe bien cargado, lo se lo se no soy un buen ejemplo para la multitud de hipocondriacos que siguen este espacio, (dios mio lo creais o no estuve lo minimo 30 segundos pensando como se dice hipocondriaco, es que es una palabra que no tiene sinonimos) pero que quereis que os diga tengo muy asimilado que mi final se producira algun dia concreto e impredecible y hasta que ese dia llegue no voy a agobiar lo mas minimo con temas sanitarios, eso si espero que quede un cadaver bien bonito y estilizado y sin un apice de grasa, parece mentira que antes de que eso suceda ya tenga banda sonora y epitafio (robado , sorry gus) esa gran frase , esas bonitas palabras mereedoras de ser cinceladas en la lapida que me albergue YO ESTOY MUERTO PERO VOSOTROS SOIS UNOS MATAOS como supongo que a nadie ha gustado este lema con tantas connotaciones urañas y agrestes pienso dedicar mis proximas decadas de vida a buscar un epitafio mas digno, Hey amigos siempre existen motivos para levantarsa cada dia con animos y con metas y obligaciones, con una sonrisa de oreja a oreja y un cafe bien cargado y humeante en la encimera